Desde la aparición del primer modelo de secadora creado por el francés M. Pochon alrededor de 1800, el cual básicamente consistía en un tambor con agujeros que giraba sobre una fogata gracias a un sistema de manivelas, mucho han evolucionado estos artefactos hasta lograr el moderno electrodoméstico que hoy conocemos y que nos puede hacer pensar cuánto consume una secadora cada vez que llega el recibo del servicio eléctrico a casa, si su monto es superior al habitual.
Casi un siglo después de aquel primer diseño, el estadounidense George T. Sampson tomó sus principios y desarrolló una versión similar a la que conocemos hoy en día, haciéndose popular en los hogares norteamericanos que en la actualidad, es una herramienta casi imprescindible para todas las familias.
Tipos de secadoras y su consumo de energía para funcionar
Una vez que hemos hecho un poquito de historia, pasemos al punto que nos atañe en específico el día de hoy: ¿Cuánto es el consumo de una secadora?, pues bien, la respuesta a esta interrogante está directamente asociada al tipo y modelo de secadora que tengas en casa, vamos a analizar algunos de ellos:
Secadoras de ventilación o evacuación
De antemano debemos indicar que este es uno de los diseños con un mayor índice de consumo energético, con un promedio de 4,8 kW/h debido al uso de una resistencia que es fundamental para su operatividad.
Este tipo de secadoras expulsa el agua a través de un conducto y su forma de trabajo es bastante simple: atrapa el aire del exterior, lo calienta con la resistencia eléctrica a la que hicimos mención en el párrafo anterior, para luego dirigirlo al tambor para y así secar la ropa, la humedad se condensa y es expulsada al exterior en forma de agua.
Secadoras de condensación
Este tipo de secadoras son una opción bastante popular en muchos hogares debido a su eficiencia y versatilidad, la primera diferenciación con el modelo anterior es que estas no expulsan el aire caliente al exterior, las secadoras de condensación retienen la humedad en un depósito interno o la eliminan a través de un desagüe.
El consumo de una secadora de condensación ronda los 4 Kw/h y aunque usa una resistencia eléctrica al igual que las de condensación, la principal diferencia radica en que estas ofrecen programas para diferentes tipos de tejidos y/o niveles de secado, característica que permite hacer un uso más eficiente de la energía que consumen.
Operan de la siguiente forma: el aire se calienta mediante la resistencia antes de ingresar al tambor y entrar en contacto con la ropa mojada. Luego, ese aire húmedo pasa por un intercambiador refrigerado con aire exterior generando la humedad que luego es almacenada en un depósito interno o se libera a través de un vertedero como ya mencionamos. Finalmente, el aire frío y seco se libera nuevamente al tambor para continuar el ciclo.
Secadoras de bomba de calor
Este modelo es uno de los que tiene menor registro de consumo energético utilizando un aproximado de 2,2 kW/h y se diferencian de los modelos anteriores en que no expulsan el aire caliente y húmedo al exterior, sino que lo utilizan para maximizar la eficiencia energética.
Otra de sus características es que operan a temperaturas mucho más bajas que las de ventilación o condensación, lo que representa una gran ventaja para la conservación en buen estado de las prendas de vestir confeccionadas con materia prima delicada.
El mecanismo de estas secadoras es aparentemente complejo, pero en realidad consiste en repetir un ciclo: hace circular el aire en el interior mediante un ventilador, pasa por el calentador donde un líquido lo calienta. Seguidamente el aire caliente ingresa al tambor para evaporar la humedad de la ropa, secándose finalmente.
Tipo de secadora |
Nivel de consumo energético |
Eficiencia energética |
Consumo promedio en kW/h |
Ventilación |
Moderado / alto |
Menos eficiente |
Entre 3 y 6 kW/h |
Condensación |
Moderado |
Moderadamente eficiente |
Entre 2 y 4 kW/h |
Bomba de Calor |
Bajo / moderado |
Altamente eficiente |
Entre 1.10 y 3 kW/h |
Nota: Los promedios de consumo en kW/h son aproximados, varían dependiendo la calidad de la secadora.
Consejos para reducir el consumo de una secadora de ropa doméstica
Pues bien, ahora que ya hemos explicado cuánto gasta una secadora de ropa doméstica en términos de energía, es importante tener en consideración una serie de tips que te van a permitir reducir un poco esos índices de consumo energéticos en favor del medio ambiente y por supuesto de tu bolsillo:
Usa cargas completas
La eficiencia energética se maximiza cuando la secadora se utiliza sólo con cargas completas de ropa, evita secar pequeñas cantidades para reducir el número de ciclos y, por ende, el consumo de energía.
Limpieza regular
Otro tip muy importante es realizar una limpieza regular de los filtros y conductos, ya que, no solo mejora la eficiencia del secado, sino que también contribuye a la seguridad del hogar, debido a que los conductos obstruidos pueden aumentar el riesgo de incendios, por lo que es esencial mantenerlos limpios y despejados.
Selección de programa
En los modelos de secadoras que te ofrezcan esta posibilidad, aprovecha la variedad de programas de secado disponibles. Por ejemplo, los ciclos cortos son ideales para prendas que solo requieren un secado ligero, mientras que las cargas más grandes o prendas muy húmedas, se beneficiarán de programas más extensos y potentes.
Separación de tejidos
Otra medida que contribuirá a reducir cuánto gasta una secadora, es que antes de realizar la carga de ropa, separes las prendas por tipo y nivel de secado necesario. Esto permite optimizar el tiempo de secado y evitar el sobrecalentamiento de prendas más ligeras.
Revisión de etiquetas
De igual forma, es de gran ayuda que consultes las etiquetas de cuidado en la ropa, los fabricantes dejan orientaciones para seguir que te permitirán elegir los ciclos adecuados para cada prenda, además de contribuir a que éstas tenga una larga vida útil a tu favor.
¿Cómo elegir una secadora que consuma poca energía?
Como hemos compartido hasta este punto, existen varios medidas que puedes poner en práctica para ahorrar energía en tus ciclos de secado de ropa, per sin duda una de las variables más importante es la selección en sí de una secadora eficiente en esta materia, para lo cual vamos a compartir algunas recomendaciones.
Ventilación, condensación o bomba de calor, cada una con sus propias ventajas en eficiencia energética, en todas ellas puedes consultar la etiqueta de eficiencia para elegir un modelo con clasificación A+++ a D, siendo la primera opción las de mayor ahorro.
Adapta la capacidad de carga a tus necesidades, optando por modelos con variedad de programas de secado, incluyendo funciones de sensores de humedad para ajustes automáticos. Busca facilidad de uso con paneles intuitivos, y verifica la ubicación y dimensiones de instalación.
Elige secadoras con bajo nivel de ruido si estará cerca de áreas sensibles. La facilidad de mantenimiento, con acceso sencillo a filtros y conductos, contribuye al rendimiento óptimo. Y finalmente, antes de decidir, investiga opiniones y reseñas para obtener perspectivas de usuarios, considerando estos aspectos, podrás seleccionar una secadora que se ajuste a tus necesidades y optimice la eficiencia energética.
Consejos para ahorrar energía en casa
Pues bien, ahora que ya conoces distintas formas de reducir cuanto consume una secadora en casa, vamos a finalizar este post con algunas recomendaciones generales con las cuales vas a reducir tu factura de electricidad todos los meses:
Desenchufa dispositivos en modo de espera
Muchos aparatos electrónicos siguen consumiendo energía aunque no los utilices. Desenchufa cargadores, televisores y otros dispositivos cuando no estén en uso. Además, configura tus dispositivos en modo de ahorro de energía para reducir su consumo.
Instala paneles solares o sistemas de almacenamiento de energía
Considera invertir en energía solar o sistemas de almacenamiento residencial, ya que luego de la inversión para adquirir e instalar estos equipos, el ahorro en tu factura de servicio eléctrico se multiplicará mes a mes.
Entre los equipos de almacenamientos residenciales podemos destacar el Bluetti EP760, este dispositivo es una estación de energía inteligente que permite almacenar la electricidad que se genere a través de paneles solares u otra fuente de producción.
El Bluetti EP760 es muy fácil de instalar y de usar, puedes colocarlo en la pared o en el suelo, según el espacio que tengas disponible. También puedes controlarlo desde tu móvil, con una aplicación que te muestra el nivel de carga, el consumo, el ahorro y otras estadísticas.
Tiene una potencia de 7.600 W y una capacidad de 19,8 kWh, lo que significa que puede hacer funcionar cualquier aparato de tu casa, desde la nevera hasta el microondas, sin problemas. Además, tiene una vida útil de al menos 10 años, gracias a sus baterías de litio de alta calidad y su sistema de gestión inteligente que las protege de sobrecargas, cortocircuitos y otros riesgos.
Te invitamos a seguir atento a nuestras próximas publicaciones donde seguirás conociendo alternativas para el ahorro de energía en casa, favoreciendo así el medio ambiente y tus finanzas al mismo tiempo.
Aprovecha la luz natural
Abre cortinas y persianas durante el día para aprovechar la luz del sol. Usa bombillas LED de bajo consumo y apaga las luces al salir de una habitación.
Actualiza tus electrodomésticos
Opta por electrodomésticos con etiquetas de eficiencia energética A o A+. Estos consumen menos electricidad y son más amigables con el medio ambiente.